Asociación para la promoción de Samaniego como destino enoturístico.
Asociación para la promoción de Samaniego como destino enoturístico.
Desde sus orígenes, datados en la Edad Media, Samaniego y sus alrededores han estado fuertemente vinculados al cultivo del viñedo. Una herencia que se refleja según nos acercamos a esta localidad, rodeada de viñedos por todos sus frentes.
En paralelo al viñedo, proponemos un pequeño paseo por Samaniego, en la que los visitantes se impregnarán de la cultura e historia de este no tan conocido enclave situado en el corazón de Rioja Alavesa.
Comenzamos nuestro paseo en el centro del pueblo. La iglesia de la Asunción se ha convertido en la figura protagonista del horizonte de Samaniego. De aspecto austero, domina el paisaje de localidad y se convierte en su centro y figura más destacada por su aspecto fortificado.
Matarredo, el barrio de las bodegas, se encuentra situado a las afueras de Samaniego. Un hecho peculiar, ya que tradicionalmente las bodegas se encontraban dentro del núcleo urbano de los pueblos.
Datadas entre los siglos XIV-XV, en la antiguedad contaba con más de 150 bodegas. Estos calados, construidos en forma de escalera para facilitar la introducción de las uvas por gravedad dentro de los depósitos, están conectados por tuberías subterráneas que hacen de desagüe hasta llegar al río, situado en la parte más baja de la ladera de este barrio.
Concluimos esta pequeña ruta en la Ermita del Cristo, un lugar que destaca por su arquitectura sencilla y unas vistas que alcanzan todos los viñedos de la zona. Situado en la subida hacia la Sierra Cantabria, esta ermita es de estilo románico, con fachada de piedra de sillar. Un ermita muy querida por los melgueros, ya que pertenece al pueblo.